12 de octubre de 2012

España/Navia, solidaridad frente al autismo

Las familias de afectados por el trastorno organizan mañana una cena solidaria que espera reunir a centenares de personas



Una actuación para niños con autismo.
Una actuación para niños con autismo. 

Navia, A. M. SERRANO

Javier -nombre ficticio- era un niño de dos años sano y sociable, como cualquier otro pequeño de su edad, hasta que «se cerró el telón». Empezó a mostrarse más distante y sus padres pensaron en un problema auditivo. Recorrieron consultas médicas hasta que el diagnóstico no admitía error: Javier tenía autismo. El autismo es un trastorno que en el noroccidente de Asturias afecta a, al menos, una veintena de niños, según la asociación «Aprendemos». No tiene cura y los padres y allegados tienen que «buscarse la vida» para que su hijo o persona querida pueda llevar una vida lo más normal posible. Una madre con un hijo con autismo lo describe así: «No te atienden, no te oyen, tardan en hablar y son muy metódicos. Lo que tratamos de hacer es "modificar" esta conducta». Es decir, ayudarles a que tengan vida social y que sea de la mayor calidad posible.

Este sábado, son protagonistas en la comarca porque las familias de la zona con hijos o personas cercanas con este trastorno organizan una cena. Es la quinta edición del encuentro, que en el Noroccidente suele tener buena acogida. El año pasado, unas 200 personas participaron en el encuentro. Este año, con la crisis, se espera menor asistencia. A la cena, que tendrá lugar en un conocido restaurante naviego, le seguirá la entrega del llamado «Aprendemos de Oro», un galardón del colectivo que este año irá a parar al ex delegado del Gobierno y ex presidente regional Antonio Trevín, en reconocimiento por su ayuda a la asociación y las familias.

La cena tiene un coste de 25 euros y los interesados pueden adquirir sus vales preguntando a la asociación. Se esperan unas tres horas de cena solidaria. «Lo que buscamos es el calor social. En esta lucha es muy importante contar con la gente», sostiene Paloma Fernández, del grupo de padres con niños autistas del noroccidente asturiano. Otros años contaron con ese calor y con la solidaridad de los vecinos; en esta edición esperan repetir éxito.

El encuentro empezará sobre las 21 horas. Las familias, asociadas al colectivo que las agrupa a nivel regional tratan de hacer más soportable el trastorno a través de la implementación de terapia basada en Análisis de Conducta Aplicado (ABA). En Navia no buscarán ciencia, sino el apoyo de la gente a un proyecto que crece gracias a la solidaridad de las familias y de personas desinteresadas. Todo el dinero recaudado irá a parar a la asociación, que a lo largo del año organiza varias actividades y talleres con los niños que padecen autismo. Las familias del Occidente afectadas por ese trastorno aseguran tener un gran apoyo por parte de la asociación «Aprendemos».

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