15 de febrero de 2012

Reflexiones en Nota Asperger

Por Leonardo Caracol Farfán

Hace días ronda en mi cabeza el pensamiento de escribir estas palabras, y como es natural no descansé hasta volverlas letras y puedan ser leídas por otros y no sólo en las imágenes de mi mente, ahora ¿qué palabras pueden ser?. Sí, evidentemente los que me conocen saben que me encanta escribir y jugar con los versos, mis juegos de palabras y metáforas absurdas, tal vez la respuesta es que simplemente quiero escribir de cómo me siento…de las cosas que han cambiado, de la perspectiva de esta vida trastornada por una simple palabra “Asperger”; no piensen que es un testimonio doloroso o que busca sensibilizarlos e inspirar comprensión o lástima, todo lo contrario, quiero insistir en palabras de alegría y esperanza, no de optimismo, porque el optimismo implica autoengañarse, porque es pensar que pasará lo mejor y no siempre es así.

Hecha la introducción quiero avanzar al tema en sí, que en estos momentos de hundir teclas se hace difuso, ya que elegir porqué idea comenzar se hace difícil, es como tres gordos intentando pasar por una puerta al mismo tiempo, pero apelaré a la caballerosidad de los tres para que vayan entrando a este escrito uno a uno y así puedan entenderlo.

Primero simplemente contarles que desde el diagnóstico he podido comprender día a día cada actitud y cada palabra, que ser consciente de mi condición me permite ir aprendiendo cosas nuevas y practicar nuevas estrategias para acercarme a las personas y a su vez entender a los demás. Al principio pensé que me estaba volviendo más Aspie mientras mas leía o aprendía, pero de a poco descubrí que en realidad estaba siendo más consciente de mi realidad podía poco a poco no estar actuando como en piloto automático, en mi mundo aislado haciendo lo que debía, hasta me di cuenta que habían películas que había visto unas 5 veces y que ahora las veía como si fuera la primera vez y me asombraba, creo que lo más impactante fue darme cuenta de cada una de esas actitudes, de mi mirada perdida cuando hablaba, de mi silencio sin decir nada por horas (pero con la idea de que me estaba comunicando), de mi imposibilidad de poder ver u oír historias tristes o dramáticas sin sentir angustia o simplemente llorar, de los relojes que suenan a lo lejos y las goteras que no me dejaban conciliar el sueño en noches oscuras de pensamientos difusos y dispersos.

Poco a poco me he ido encontrando conmigo, y asumiéndome y lo que es mas, queriéndome, en este tránsito he encontrado gente maravillosa, que sé que aunque no los abrace o les diga que los quiero mucho a cada rato saben que es así, han llenado mi vida de comprensión, de aceptación, creo que en gran medida son así conmigo porque quisieran que así fueran con sus hijos en el futuro, y yo sé que así será.

Sé que muchos han creado a lo que yo llamo un SUPERASPIE marcando las aptitudes ligadas al conocimiento y a la inteligencia e intentan consolar su presente en un futuro de ingeniero, físico, matemático, etc. para con sus hijos o hijas, otros han creado a un discASPIEtado, en que el dolor y la aflicción por el futuro no los deja dormir, ven a su hijo tan desprotegido y expuesto a la perversidad de sus pares que si pudieran tendrían una burbuja alrededor de ellos, porque no hay niño más dulce, inocente y sincero que un niño con Asperger.

Pero somos solo personas un poco diferentes, a veces extrañas, todos no nos van a entender, pero algunos sí, con la ayuda y dirección adecuada tendremos una vida normal, como todos, si nos esforzaremos mucho en ciertos temas, pero es como todos, ¿a quien no le cuesta a veces un área de la vida?.

Yo no soy especial por tener Asperger, soy especial porque nadie es como yo, porque tengo una familia que está conmigo, un hijo que amo, unos viejos amigos y los nuevos, todos hermosos y cariñosos, soy especial para ellos, para los demás soy extraño, pero ni el más inteligente ni el más fracasado; amo, río, corro, salto, lloro, confío, espero, sueño, como todos, Mi diversidad y la de tu hijo vive en tu mirada y en tus expectativas, una amiga me dijo que el pez crece dependiendo del tamaño de la pecera en que está…¡como es la pecera en que visualizas a tu hijo o a tu hija…?

Yo soy Leonardo, soy analista químico, padre, hijo, hermano, amigo, tío, cristiano, poeta, creativo, simple, sencillo…ah y ¡tengo Asperger!

No es mi intención criticarles ni llamarles la atención, solo darles la visión de una persona de 38 años que cree, vive, siente y ve desde el Asperger.

Leonardo Caracol Farfán

Santiago, Chile.



No hay comentarios: