Kenned participa en caminata para llamar la atención sobre el autismo. (FOTO CORTESÍA)
Por Iliana Lavastida Rodríguez Diario Las Américas
Miami.- Kenned tiene 12 años. A los 20 meses de nacido fue diagnosticado
con autismo y desde entonces su madre condicionó su vida a las
necesidades especiales del pequeño.
“Él padece trastornos del lenguaje y discapacidad intelectual. Por
primera vez, gracias a terapias y tratamiento para la comunicación pudo
efectuar completo el recorrido de la caminata Aututism Speak”, realizada
el domingo 7 de abril en el parque Juan Carlos Bermúdez de la ciudad de
Doral, comentó su mamá en conversación con DIARIO LAS AMÉRICAS.
Abril es el mes dedicado a despertar conciencia sobre el autismo de
cuya propagación en la población infantil estadounidense las
estadísticas refieren que uno de cada 88 niños lo padecen.
Hasta el momento y a pesar de los esfuerzos dedicados a investigar sobre
los orígenes de la condición, los científicos no han alcanzado a
definir qué exactamente la origina.
Por eso Kendra Ortega, madre de Kenned, como la mayoría de las que
tienen niños autistas, además de adquirir entrenamiento para aprender a
tratarlo, ha tenido también que erigirse en su terapeuta, representante
social y en buen medida, la mediadora para que el padecimiento no le
limite más allá por el desconocimiento generalizado en torno a esta
enfermedad.
El autismo según los médicos, afecta la comunicación, la socialización y la reciprocidad emocional.
“Por eso los niños autistas cuando llegan a la adolescencia padecen
episodios de frustración porque se percatan de que tienen un problema y
lo sufren”, aseguró Kendra.
Tras los recortes estatales efectuados a varios programas sociales entre
ellos el Medicaid, la frecuencia de terapias requeridas para niños
autistas se ha visto limitada.
“Los retrasos en el pago a las agencias que contratan a los terapeutas
afectan grandemente la sistematicidad en los tratamientos y esto
precisamente es lo más necesario para que un niño autista alcance a ser
funcional”, explicó.
Ortega cuenta que con mucho esfuerzo, el niño ha ido experimentando
progreso académico sin embargo, su integración con el resto de los
compañeros de escuela y su participación en eventos se hace más difícil
porque la incapacidad de las personas autistas para lidiar con
determinadas circunstancias, lo hace propenso a desestabilizarse
emocionalmente.
“No hace tanto en uno de esos episodios mi hijo mandó a un maestro al
hospital porque cuando está frustrado lo mismo se auto agrede que la
emprende contra otra persona”, recordó Ortega.
Teniendo en cuenta esta realidad y con la ayuda de la directiva del
colegio a donde asiste Kenned, Kendra inició el trámite para la
asignación de una persona que lo atienda a tiempo completo durante las
horas de permanencia en la escuela.
“En estos momentos, Howard D. Mc Millan Middle School a donde él asiste,
ya realizó la parte del trabajo que le corresponde para la solicitud”,
aseguró Ortega.
“El niño está inscrito en el programa Individual Education Plan (IEP)
por sus siglas en inglés, e incluso está notificado como que ya le
asignaron a la persona que corresponde para estos casos, pero en
realidad esa persona no existe aún”, aseguró.
La madre de Kenned atribuye la atención ineficiente que está recibiendo su hijo a recortes de presupuesto.
No obstante su mayor preocupación consiste en que con el pretexto de
ahorrar recursos tanto las escuelas a donde asisten niños autistas como
la sociedad en general, “están permanentemente corriendo el riesgo de
episodios dramáticos, o por el contrario asumen la potestad de privarlos
de sus derechos para evitar confrontarlos”.
El autismo es una condición especial con tendencia a la proliferación
según lo indica el número creciente de personas que lo padecen.
Tanto la búsqueda de recursos para investigar sus causas y posible
tratamiento resulta importante, como la educación de la sociedad para
aceptar que interactuamos con personas diferentes, y por tanto se impone
la obligación de facilitarles mecanismos que los protejan del
aislamiento.
Ilavastida@diariolasamericas.com
@IlianaLavastida
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