Autismo. Como gestionar las rabietas

Los niños con autismo son conocidos por tener rabietas. ¿Qué quieren los niños? Caramelos, atención, juguetes favoritos, no ir a la cama, no tomar la medicina, más galletas……

Rabietas en el autismo

Los niños autistas quieren lo que quieren y cuando lo quieren. Hay algunas cosas que usted puede hacer para prevenir el comportamiento de rabieta (por ejemplo, enseñar a los niños a esperar), pero que no te pueden ayudar cuando usted está de compras con un niño gritando.

La mejor solución para una rabieta es un compromiso de todas las personas que tienen contacto regular con su hijo para ignorar el berrinche y nunca dar al niño lo que está demandando durante el tiempo que él todavía tiene una rabieta. He aquí cómo hacerlo y permanecer cuerdo.

¿Qué es una rabieta?

Un berrinche es una forma de comunicación. Es una manera en la que un niño autista dice:

“Será mejor que me deis lo que quiero”

Una rabieta es una reacción normal a la frustración (no conseguir lo que quieres) que se ha convertido en un problema de comportamiento . Es normal que un niño a exprese ira cuando se sienta decepcionado. La ira es una respuesta saludable, siempre y cuando se exprese de una manera socialmente aceptable.

Cuando un niño expresa la ira, nuestra primera reacción puede ser diversión. Es divertido observar cómo un niño se enoja. Su cara frunce el ceño, ellos dicen cosas divertidas, y parece tan entristecido….. Nuestra segunda reacción, por desgracia, puede ser la de ceder ante ellos. En esta situación una reacción normal de ira puede convertirse en una rabieta. El niño aprende rápidamente que esta herramienta que acaban de descubrir es como magia. El niño consigue lo que quiere.

Conforme pasa el tiempo, los padres se enojan demasiado y empiezan a castigar , ignorar, gritar, y, finalmente, para dar de nuevo. Es por esto que muchos padres dicen:

“Intenté ignorar, pero no funcionó.”

No se puede ignorar por un tiempo. Siempre se debe ignorar, en todas las situaciones, o no funcionará. El niño debe aprender que usted nunca cederá a sus rabietas.

¿Qué sucede cuando ignoramos o castigamos por un tiempo y luego cedemos? El niño ha aprendido que para que una rabieta surta efecto, tiene que ser fuerte y debe durar por mucho tiempo. Para poner fin a un berrinche, usted y todos los que tienen contacto regular con su hijo tendrán que estar de acuerdo en no ceder a una rabieta.

Procedimiento del conteo

Una estrategia es que el niño sepa que el refuerzo no está disponible actualmente. Se puede usar cuando un niño quiere algo que puede tener, pero no por una rabieta.

Padres: “. No se llora” (Inicio contar tan pronto como el niño respira pero se detiene tan pronto como el llanto comienza de nuevo.)
Padres: Repetir “No llorar” (Reanudar contando cada vez que el niño deja de llorar.)
Con el tiempo deja de llorar para un conteo completo de 10.
Padre: “¿Qué quieres?”

Cuando un niño tiene ecolalia , puede comenzar a utilizar la secuencia de números como una petición para el objeto deseado. Los números deben ser contados entonces de modo no verbal, con los dedos en su lugar. En algunos casos, el procedimiento de recuento en realidad puede intensificar la rabieta porque la presencia de los padres todavía sugiere que él puede conseguir lo que quiere. Esto puede ser especialmente cierto si las rabietas han sido efectivas en el pasado.

Ignorar

Planeando ignorar o táctica del ignorado , es una estrategia para hacer frente a las conductas que se desarrollan en la atención. No es que se utilizará cuando la rabieta causa daño al niño, otros, oa la propiedad. Para ignorar el daño niño auto, otros o la propiedad estarían enseñando un comportamiento que es mucho peor que una rabieta. Si su hijo está perjudicando a sí mismo, a otros oa la propiedad, pedir a los profesionales que trabajan con usted por otra estrategia. Aquí está la manera de poner en práctica planificada para ignorar las rabietas:

a) Respuesta coherente de todo el mundo

Todo el que tiene contacto regular con su hijo debe estar de acuerdo en utilizar este enfoque para todos y cada rabieta. Si su niño puede entender que, cuando está en calma, dígale a su hijo que no se preste atención a cualquier rabietas (uso palabras que él entiende) y que no se le va a dar lo que quiere, siempre y cuando él está teniendo una rabieta.

b) Completar ignorando de la rabieta

Cuando y donde se produce un berrinche, debe ser completamente ignorado. Esto significa que no hay atención positiva o negativa. La rabieta debe ser tratada como si no existiera. No mire a su hijo (excepto por el rabillo de su ojo para garantizar su seguridad). No hable con su hijo. No toque a su hijo (a excepción de protegerlo de dañarse a sí mismo, a otros o a la propiedad). No le de abrazos, azotes, palmadas, apretones……

c) Elogios a otros niños por su comportamiento apropiado

No hable con los demás en la habitación sobre la rabieta del niño. Hable con otros adultos acerca de las noticias, los deportes, o el clima. Centrarse en los otros niños o personas de la habitación y lo que están haciendo bien.

Además, no ignore el buen comportamiento cuando ocurra en otros momentos. Cuando vea a su hijo comportarse así, sentado en silencio, dígaselo:

“Me gusta la forma en que estás sentado tan tranquilamente!”

Esto permitirá que el niño sepa que usted presta atención a la buena conducta. 

d) Si usted está solo, ocupe su atención con otras actividades

Leer un libro, llamar a un amigo (esto puede ser una buena idea, siempre y cuando el amigo le apoye en su nueva posición dura el amor con su hijo – pero no llame a cualquier persona que le convencerá a ceder), escuchar música, ver la televisión, realice algo que lo distraiga de prestar atención a la rabieta de su hijo.

e) El refuerzo positivo para el comportamiento apropiado

Cuando la rabieta se detenga (en un principio, esto puede llevar mucho tiempo), espere unos instantes, y luego elogie a su hijo por su nuevo comportamiento apropiado.

No hable de la rabieta hasta que hayan pasado 30 minutos. En ese momento es apropiado decir:

“Ahora pídeme de nuevo una galleta (o el elemento que estableció la rabieta) de buenas maneras”.

Este refuerzo positivo fomentará una conducta apropiada.

Al intervenir en una rabieta……

Si su hijo comienza a hacerse daño, a otros, o a una propiedad durante una rabieta, debe intervenir. Si su hijo está tratando de herir a otros, retire las demás de su alcance y dele a los demás toda su atención. No hable con su hijo. Continue ignorando la rabieta. Si su hijo se está haciendo daño a sí mismo, elimine todos los elementos que puedan dañarlo o mueva a su hijo a un lugar más seguro. No hable con su hijo y utilice sólo la cantidad de contacto físico necesario para garantizar la seguridad de su hijo.

Si su hijo se encontraba completando una tarea cuando empezó la rabieta, ignore la rabieta, pero asegúrese de que el niño complete la tarea, incluso si esto significa ayudarlo.

Obtener ayuda para hacer frente a las rabietas

Hable con personas de apoyo que entiendan lo que está haciendo con su hijo con autismo. Con suerte, usted tiene un cónyuge, amigo, familiar, y / o profesional para compartir sus progresos. Esto ayudará a mantener el rumbo y le ayudará a lidiar con las miradas extrañas que se obtiene de las personas de su entorno que no entienden lo que está haciendo a su hijo.

Pídale a alguien que observe su táctica de ignorar para asegurarse de que no está proporcionando atención involuntaria a su hijo con autismo. Utilice la táctica de ignorar durante al menos un mes antes de pensar en cambiar de táctica. Para los comportamientos que han existido desde hace mucho tiempo se necesitará más tiempo para extinguirlos. Si el comportamiento de rabieta se produce de nuevo después de que se haya detenido, aplique el planeado ignorando todo de nuevo. Su hijo debe tener la idea de que las rabietas no le ayudan.

Los berrinches como una solicitud de atención

Los niños con autismo a menudo se comunican a través de su comportamiento. Que bien puede ser lo que está pasando en una rabieta. Usted puede entender que el niño está tratando de decirle algo, pero “debe utilizar sus palabras” o comunicarse de alguna otra manera.

Mientras el niño no tenga rabietas, alábele cuando el niño use sus palabras. Además, asegúrese de que escuche, no ignore la buena comunicación (se levanta y cumple con la necesidad o petición si es apropiado – o explicar por qué no es el caso).  Muéstrele a su hijo que es recompensado por una comunicación adecuada.

Una rabieta puede ser una solicitud de atención. Los padres tienen una tendencia natural a correr a sus hijos cuando están en apuros. Desafortunadamente, los niños pueden aprender a llamar la atención con sólo gritar. Es importante que usted deje de reforzar el comportamiento dando atención a su hijo. En su lugar, dele mucha atención positiva durante las conductas apropiadas. Por ejemplo, acercarse a él cuando está jugando tranquilamente y ofrecer un montón de abrazos y palabras amables (lo que funciona como un refuerzo positivo para el niño).

Si el niño está usando comportamientos de auto agresión o destructivos para llamar la atención, no deje al niño solo. Bloquee el comportamiento y proteja al niño, pero no diga nada y no le proporcione ningún toque “calmante”.

¿Qué problemas sensoriales pueden causar las rabietas?

Algunas rabietas están relacionados con problemas sensoriales.

Una rabieta puede ocurrir debido a la audición de un ruido, ver algo que les disgusta o temen….

Si sospecha que este puede ser el caso, indague en los problemas sensoriales y consulte al profesional que trate a su hijo.

Algunos niños hacen cosas en una rabieta que causan auto lesiones (por ejemplo, golpearse la cabeza, golpearse uno mismo……). Los investigadores creen que algunos niños se lastiman al liberar endorfinas en el cuerpo que luego les proporciona una sensación de que disfrutan. Si su hijo se está haciendo daño a sí mismo, por favor póngase en contacto con un psicólogo o un psiquiatra u otro profesional médico para su evaluación.

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(Tomado de http://www.mundoaspie.es/2015/06/09/autismo-como-gestionar-las-rabietas/)