Al Centro de Atención Integral para Personas con Autismo (Caipa), que funciona desde el 2008 en la quinta Villa Carmen, ubicada en Bella Vista, llegó el pasado miércoles un informe técnico del Instituto Municipal de la Vivienda de Maracaibo (Ivima), en el que se indica la directiva del plantel: “Reubicar la institución para un inmueble que tenga los espacios acordes a la actividad que realizan”.
Ante la misiva, ayer, los padres y representantes de los 240 niños que reciben atención en este centro protestaron. “Quieren sacar a nuestros niños autistas de Villa Carmen y no es legal, porque existe un comodato de 30 años”, dijo indignada Zulay Olivar, mamá de uno de los alumnos.
Desde el mismo miércoles dos efectivos de la aviación militar custodian la sede de Caipa. La subdirectora del centro, Ana Goitía, precisó que en el documento, de 21 páginas, indican que ellos no están empleando las áreas de la infraestructura para dar clases. “Dicen que los espacios son sub utilizados, porque cuando vinieron hacer la inspección en febrero, fecha en la que se hicieron pasar por funcionarios de Corpozulia, solamente tomaron fotografías de unas áreas donde tenemos unos pupitres arrumados, pero nosotros estamos haciendo las atenciones periódicas”.
Brenda Vielma, otra representante, manifestó que en el informe se pide la reubicación, pero “nunca ofrecen una alternativa para nosotros que no tenemos cómo pagar una institución privada y acudimos a Caipa porque es el único centro público que tiene el Zulia”.
Caipa cuenta con un terreno propio en la urbanización La Picola, parroquia Juana de Ávila, y tienen el proyecto, pero no existen los recursos para la ejecución del mismo.
A través de un boletín de prensa emitido por el ayuntamiento marabino, la presidenta del Ivima, Mariela Fuenmayor, señaló: “Jamás hemos emitido ninguna comunicación para el desalojo de Villa Carmen, simplemente entregamos un informe técnico donde se expresa las condiciones físicas de la infraestructura, inspección que fue solicitada por ellos mismos”.
Por su parte, Anaydée Morales, asesora de la Alcaldía, indicó: “Las lluvias causaron graves daños a la edificación por lo cual tuvo que ser cerrada. Los pequeños están recibiendo sus clases en salones contiguos ubicados a las afueras. La falta de impermeabilización del techo y la filtración en la cúpula ha generado que el friso se desprenda”.
Según explicaron los padres, en el contrato de comodato de la institución se estableció que el ayuntamiento se comprometía al mantenimiento del centro. “Sin embargo, nosotros mismos hemos estado encargados de eso, porque nos quitaron los obreros y los polimaracaibo que resguardaban el plantel”, dijo Amira Surmay.
Goitía indicó que el Metro de Maracaibo les ayudó con la impermeabilización
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